DEP querido Toni Vadell Ferrer
Siempre he creído y cada vez lo creo con más fuerza, que Dios va haciéndose presente en nuestras vidas de muy diferentes maneras… a veces lo hace maravillándonos ante lo que vemos o experimentamos, otras veces mediante acontecimientos que nos recuerdan su presencia y otras mediante personas que van encontrándose contigo en el camino de la vida.
Una de estas personas que Dios ha puesto en este camino sinuoso de mi vida, hace ya 23 años, se llama Toni y se apellida Vadell Ferrer. Primero me lo encontré recién ordenado sacerdote y más recientemente como obispo. Dos períodos de su vida y de la mía, pero una misma persona. Lo conocí siendo un apasionado de la vida, la misma pasión que ha tenido de obispo; lo conocí con una alegría sincera, la misma que ha desprendido siendo obispo. Conocí a un Toni muy sensible ante los más pobres y humildes, sensibilidad que siguió conservando siendo obispo auxiliar de Barcelona; lo conocí teniendo don de gentes del que no ha perdido un ápice en su episcopado, lo conocí con un humor de apariencia despistada, que siguió conservando; era y fue hasta su final un hombre realista, fue una persona fiel a sus amistades, siempre soñador… Era profundo en su espiritualidad y lo siguió siendo hasta su último aliento, no predicaba lo que debía de hacerse, sino que practicaba lo que decía y sobre todo, fue y será un hombre que nos ha facilitado el ver a Dios presente entre nosotros. Y lo mejor que se puede decir de alguien: fue y ha sido hasta el final una excelente persona.
Ahora, te nos has ido querido Hermano, el Padre te ha llamado, pero antes has vivido con tu cruz a cuestas, en la soledad de una cama, con pocas palabras, rodeado de poca gente, sin miradas, sin muchas sonrisas. Desde esa realidad nos has querido dar tu última catequesis: integridad, profunda fe, la catequesis de la ausencia de queja, de vivir estos momentos con dulzura y dejándote llevar por El, a donde El te quiera contigo.
DEP querido Toni, disfruta de Aquel por quien todo lo has dado! Los que todavía quedamos aquí jamás te olvidaremos.
José Ramón López, director de operaciones de la FSH