En momentos de dificultad y sufrimiento, la Semana Santa entra en nuestras casas con mayor justificación.
Es ahora cuando más necesitamos de la ayuda de los demás y cuando los demás nos necesitan y tenemos que estar allí para ellos. Son tiempos de solidaridad y empatía.
Intentemos, si podemos, aprovechar este tiempo lo mejor posible: seamos generosos; ayudemos a quien lo necesita en nuestro entorno; busquemos, a lo mejor por teléfono o en las redes sociales, a las personas que están más solas;
Recemos al Señor por los que pasan por esta prueba en Italia y en el mundo.
Aunque estemos aislados, el pensamiento y el espíritu pueden llegar lejos con la creatividad del amor.
Papa Francisco
La Iglesia celebra la Semana Santa. Conmemora los acontecimientos de la pasión, muerte, sepultura y resurrección de Cristo, que constituyen el misterio pascual, el centro de la vida del Señor.
Este año la pandemia del coronavirus nos hará vivir la Semana Santa confinados. Pero el papa Francisco, nuestros obispos y sacerdotes llevarán a nuestras casas las celebraciones litúrgicas, a través de las redes sociales y la televisión. Además, la Conferencia Episcopal Española ofrece una publicación que permitirá la participación espiritual de los fieles en la celebración de los días centrales del año litúrgico, desde el Domingo de Ramos al Domingo de Resurrección.
La celebración del Día del Amor Fraterno, en el día de jueves Santo, es un momento privilegiado, en estos días que celebramos como Iglesia la pasión, muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo, para llamar a vivir la fraternidad y hacer vida real el mandamiento nuevo del amor.